Escuché Maquillada en la cama de Juliana Gattas
Y estas son mis impresiones - sentires de la primera y varias escuchas posteriores, después de 13 días.
Estaba muy ilusionada por escuchar este disco, especialmente luego de ver los cortes que la reina del pop argentino1, Juliana Gattas, sacó de su (no puedo creer) primer disco como solista, Maquillada en la cama (2024). Claramente si eres de Latinoamérica (como yo - lima, perú) y tenías televisión por cable, creciste escuchando Miranda! mientras veías Laguna Beach2 en MTV para luego ya darle el espacio importante que tiene el pop para una persona que ama la vibración del sintetizador en su pecho.
Aquí unas palabras (porque no es estrictamente una reseña, es más lo que me hizo sentir y hacia dónde me llevó) sobre este enorme disco lleno de máscara de pestañas y sintetizador.
Borracha en un baño ajeno es hermosa, ya me había dado los mejores viajes en micro del año pasado sintiéndome Jeannette. Lo primero es lo primero y lo primero es bailar (verdad).
Maquillada en la cama. Ya era mi canción favorita. Me encanta el dramatismo de los violines y ayuda totalmente a la escenografía que luego plantea el videoclip. Hermosa línea la de “siempre me preguntan que se siente llorar desde la cima de la felicidad?”
La casa del amor nocturno es hasta el momento la más bailable, siento una de esas luces cortadoras y nueva ola, muy lindos arreglos la verdad. ¿CÓMO TE EXPLICO QUE NO ENTIENDES? Esa desesperación es espectacular.
Botas negras es muy hot, me siento Virginia de GH.
Miro hacia el cielo. Mentí, esta es más hot. Muchísima nostalgia de amor de verano. Me siento en un atardecer del último fin de verano a los 15 (pero podría ser ayer también) mojando los pies en el mar. MIRO HACIA EL CIELO Y SIENTO QUE NADA VA A CAMBIAR.
Emocionalmente tuya es literalmente yo no te pido la luna,3 pero como ya lo dijo Juliana misma: yo SÍ te pido la luna. Intensidad perenne, como nos gusta. “Emocionalmente tuya, mi cuerpo en la calle” (mi corazón es tuyo, materialmente no soy de ti).
Lejos del fuego: Arreglo mi radio para meterle unos pasitos y voz bajita aguda y mucho sintetizador tranqui. Siento que va a explotar. Hermosa percusión directo al latido del corazón. Fuegooooo. DIOS, LA TROMPETA, fallecida. Me encuentro bailando parada en mi cuarto con la luz apagada. La parte última es exquisita. Creo que esta es mi favorita (Sí es, confirmado).
Y CÓMO NOS LLEVA A
Un taxi al infierno: Puñito arriba con ese sintetizador. Wooooooooo. ME TIEMBLA LA BOCA. A estas alturas de la noche el tantear al taxista ya no está permitido y si te conversa, tú le respondes. PERO, mientras estás regresando en taxi a tu casa y tratas de no llorar y menos de vomitar, son necesarias las preguntas al alba. Y ese boom claramente es tu corazón en M. Hermoso final del disco.
Drama continuo, sin pausa. Muchas ganas de bailarlo con mis amigxs, de escuchar a Juliana en vivo. Agradecimiento particular al productor de esta maravilla, Alex Anwandter4, se nota completamente su sensibilidad, sin dejar de lado lo que por años de años Juliana Gattas nos ha enseñado con su voz, su puesta en escena y sus looks. Realmente este disco es como una telenovela, con una actuación completamente ridícula, pomposa. En esta narrativa, entendemos esa ridiculez porque - obviamente - nosotras somos las ridículas en cada estación de la fiesta hasta llegar a casa y ver el sol. Solas.
Lali también es la reina del pop argentino, qué duda cabe. Sin embargo, Juliana Gattas merece todo el spotlight acá y, además, podemos discutir en sí la idea de los sistemas monárquicos en algo tan colectivo como la música pop. Me haré cargo de eso en algún otro momento de esta vida.
Vivirá por siempre en mi el comercial de Laguna Beach con Traición de fondo, así me la aprendí, mientras LC se chapaba a Stephen en Cabo.
Me encanta la versión original, la de Javiera Mena es casi tan igual de encantadora.
Te amo Alex, a pesar de que no hayas venido a mi país el año pasado con tu último disco. La verdad es que yo tampoco hubiera venido.